Ayer tarde descargó una importante
tormenta entre la muela del Castellar, el río Gállego y la ciudad de Zaragoza.
Estas imágenes corresponden a las llamadas "Alcantarillas" a la entrada
de Villanueva de Gállego. El cauce generalmente seco de la llamada "Val
ancha" parecía ayer un río. Este barranco viene recogiendo las aguas a lo
largo de 20 kilómetros desde el monte del Castellar y los pinares de Zuera,
desembocando en la terraza fluvial del Gállego justamente en ese punto. Desde
la autovía que circunvala el pueblo, los caminos que discurren por el fondo de
este barranco parecían auténticos ríos. Decían los abuelos que había que temer
a la Val de hecho he conocido los muros que servían para colocar las espuerta
en la entrada de la población, para que así no entrara agua. La Val parecía ayer
un torrente, pero a mi memoria vino que dentro de dos años se recordará el
centenario de una importante tormenta que anegó todas las huertas del Bajo
Gállego entre Villanueva, San Juan de Mozarrifar hasta Cogullada en Zaragoza,
este riachuelo fue entonces un auténtico río, quizás por eso los villanovenses
todavía siguen mirando con recelo a la Val, aunque en la actualidad las obras
de la autovía hacen de muro de contención y canalización del agua que baja
desde la Sarda villanovense.
sábado, 19 de septiembre de 2020
Tormenta en Villanueva de Gállego (Zaragoza)
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