Castillo nuevo de Oza

En verano de 2014 estuve haciendo fotos en el castillo viejo de la Selva de Oza, el que domina la llamada “Boca del Infierno” y situado junto a la “vía romana” por la que según el profesor Ubieto, pasó Carlomagno mientras su sobrino Roldán era derrotado. Ayer volví al lugar y me sorprendió ver una cinta de esas que avisan de peligro ante un posible derrumbe. Hoy, editando las fotos, las he comparado con las de hace 8 años y me he percatado de que el peligro es más que evidente. 

En las fotos de hace casi un década se aprecian elementos en la parte superior de la torre, que faltan en la de hoy día y el estado de deterioro en la estructura del castillo es cada vez más avanzado. Por ejemplo lo que más ha cambiado entre la foto de 2014 y la actualidad es la esquina superior de la parte sur-este y parte del muro oriental que se ha desprendido. 

Es una pena que un edificio tan singular, Bien de Interés Cultural, cargado de historia y ubicado en un entorno con tanto encanto, desaparezca. No costaría nada reconstruir lo perdido, entre otras cosas porque las piedras siguen allí. Se me ocurren ideas para hacer el lugar atractivo, como hacer de la torre un mirador sobre el paso del Infierno y las montañas que rodean la selva de Oza. Este lugar es muy conocido pero muy poco disfrutado y merece la pena, hacerlo más atractivo. Además es un lugar importante dentro de la fundación del reino aragonés.

La torre de Oza en la Lista negra de la UNESCO