Según el blog de Josémi Velilla (“entrada del 3 de marzode 2009”) el día siguiente a la fiesta de San Nicolás. En este caso dos días después es decir, el día 8 por la mañana; “Los danzantes salen a echar las mudanzas, a toda persona que lo desee y se reparte el pan bendito entre el vecindario”. Durante todo el recorrido se bailan varias danzas con los palos y no solo lo hacen los danzantes, sino personas que lo han sido o que lo saben.
Según me contó César Rivera Galán, este dance tan solo se ha dejado de representar
durante los años de la Guerra Civil, lo que supone todo un mérito debido a los
pocos vecinos que quedan en Velilla y a la fuerte emigración que ha sufrido el
pueblo en la segunda mitad del siglo XX, cosa que es cierta pues en la
actualidad consta con escasos 200 habitantes de los 1.000 con que contaba hace
ahora un siglo. Al final se escucha la Marcha Real que en este caso, al
contrario que en otros lugares no se bailó (como si ocurre en otros lugares)
sino que lo hicieron fuera de programa.
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